El marco Cynefin, desarrollado por Dave Snowden, es una herramienta conceptual que nos ayuda a entender la complejidad de los problemas que enfrentamos en diferentes contextos y volvernos más resiliente como organización. Este enfoque propone una clasificación de las situaciones en cinco dominios distintos: Simple, Complicado, Complejo, Caótico y Desorden. Cada uno de estos dominios representa un tipo específico de entorno en el que nos movemos, y requiere enfoques y estrategias diferentes para abordar los desafíos que se presentan.
En el Dominio Simple, nos encontramos con situaciones donde las relaciones de causa y efecto son claras y predecibles. Aquí, las soluciones son directas y se pueden aplicar las mejores prácticas y procedimientos estándar para resolver problemas comunes. Por ejemplo, seguir instrucciones claras en un manual de operaciones o aplicar un procedimiento establecido para resolver una tarea rutinaria en el trabajo.
Por otro lado, en el Dominio Complicado, las relaciones de causa y efecto no son inmediatamente evidentes y requieren análisis o experiencia para determinar el enfoque correcto. En este dominio, se necesitan expertos y conocimientos especializados para abordar los problemas de manera efectiva.
En contraste, en el Dominio Complejo, las situaciones son dinámicas y emergentes, con relaciones de causa y efecto que solo son claras en retrospectiva. Aquí, las soluciones no se conocen de antemano y emergen a través de la experimentación y la adaptación a medida que se aprende más sobre el problema. Este dominio es el terreno de la innovación y la resolución creativa de problemas, donde se fomenta la exploración de nuevas ideas y enfoques para encontrar soluciones efectivas.
Cuando nos encontramos en el Dominio Caótico, nos enfrentamos a situaciones en las que no hay una relación clara de causa y efecto. Aquí, todo es impredecible y caótico, requiriendo una acción inmediata para establecer el orden y la estabilidad antes de poder abordar la situación de manera más estructurada y controlada. Este dominio es donde se manejan crisis repentinas y se toman decisiones urgentes para restablecer el control y la estabilidad en medio del caos.
Finalmente, el Dominio de Desorden es un estado de confusión donde no está claro en qué dominio se encuentra la situación. Aquí, se requiere un análisis adicional y una comprensión más profunda de la situación para determinar la respuesta adecuada.
Al comprender y aplicar el marco Cynefin, las organizaciones pueden abordar los problemas de manera más efectiva al reconocer la naturaleza de la situación y seleccionar las estrategias apropiadas para abordarla de manera adecuada. Este enfoque nos ayuda a evitar soluciones simplistas o ineficaces al reconocer que diferentes situaciones requieren enfoques diferentes para la toma de decisiones y la resolución de problemas en función de su complejidad y naturaleza única.
EL AUTOR: Timothé Graziani